El Día de Acción de Gracias

Mi vacación del Día de Acción de Gracias fue divertida pero demasiado corta. En miércoles, yo fui a la Cheesecake Factory para cena con mis amigas y era muy divertido. En jueves, el día festivo, yo limpié mi casa, vi la Desfile de Acción de Gracias de Macy’s en mi televisión y me cocí galletes. Mis abuelos llegaron a las tres para la cena y comimos a las cuatro. Tuvimos pavo, puré de patatas, ejotes, puré de patatas dulces, crema de cebolla, sopa de calabaza y piña. ¡Yo estaba muy llenó pero comimos otra vez! Comimos pastel de manzana y galletas. Alrededor de siete y media, cuando mis abuelos dejaron de mi casa, mi familia y yo fuimos a la casa de mi tía y tío para postre. Todos los de mi familia de mi padre estuvieron allí y fue muy divertido. Al día siguiente, “viernes negro,” yo fui al centro comercial a las cinco de la mañana para compras. Entonces yo fui a las otras tiendas y compró algunas cosas. También, elegí cosas para mi madre para comprar y guardar para Navidad para mí. Era un día muy larga pero divertida. ¡Era muy cansada y tuve una siesta cuando yo regresé a mi casa! ¡General, mi vacación del Día de Acción de Gracias fue muy divertida y fue agradable para pasar el tiempo con mi familia!

Una Noche Espantosa

Era la noche de Halloween y tres chicas, Corina, Catalina, y Rosalida, estaban en el sótano de la casa de Catalina. No querían pedir dulces, querían mirar películas espantosas. Rosalida trajo palomitas al sótano para las chicas. No había nadie en la casa porque los padres de Catalina estaban en una fiesta de Halloween. Solamente las chicas y los perros estaban en la casa. Era una noche muy divertida hasta que las cosas extrañas comenzaron a suceder. Cuando estaban mirando la película “Paranormal Activity,” los perros ladraron por un momento. Las chicas investigaron a la causa pero no encontraron nada. Entonces, las chicas oyeron un golpe fuerte en la puerta, pero, ¡No había nadie! Ellas trataban de calmarse por creer que el golpe era parte de la película. Se sentaron y comenzaron mirar a la película otra vez.
Inesperadamente, el proyector y las luces se apagaron y el sótano estaba totalmente oscuro. No podían ver nada y oían pasos de arriba. ¡De repente, Rosalida y Catalina oyeron a Corina gritar, "Aye, Chihuahua!" y ella desapareció! El proyector y las luces fueron encendido por Catalina, quien encuentró la luz. Solamente Rosalida y Catalina estaban en el sótano ahora. El teléfono sonó y Catalina lo contestó. La voz en el otro extremo le preguntó, “¿Está allí Corina?” Ellas gritaron y Catalina tiró el teléfono en el sofá. Luego, ellas oyeron las pelotas de la mesa de billar y las vieron rodar vuelta. Oyeron a alguien caminando por las escaleras. ¡Era Corina! ¡Ella era la fantasma quien rondaba la casa de Catalina!

La Iglesia de San Francisco